Raíces en Juego: La Fiesta de la Identidad en el Corazón del Amazonas
Escrito por: Adán Martínez
Grupo participante en el Primer Festival de Juegos Tradicional del Trapecio Amazónico. Comunidad Lomalinda, Amazonas.
Los días 17 y 18 de agosto de 2024, el corazón de la selva amazónica se llenó de risas, cantos y el eco de los juegos ancestrales, mientras la comunidad indígena de Lomalinda, ubicada a orillas del majestuoso río Amazonas, se convirtió en el escenario de un festival que celebró con fuerza la herencia cultural de los pueblos indígenas. Este evento, parte del proyecto liderado por la Fundación Caminos de Identidad (FUCAI), resaltó la importancia de mantener viva la identidad y las tradiciones de la niñez indígena en un entorno que ellos llaman hogar.
Desde las comunidades de Nazareth, Arara, Santa Sofía y Nuevo Jardín, llegaron niños y niñas, caminando por senderos invisibles entre la espesura de la selva o navegando en canoas que surcaban las aguas del Amazonas. Con orgullo, vestían sus trajes tradicionales, adornados con los colores vibrantes del achiote y el uito, que pintaban sus cuerpos con formas simbólicas, narrando las historias de sus ancestros. Estos jóvenes indígenas demostraron que para ellos, el camino es la identidad, una identidad que se teje y fortalece a través de cada actividad cultural y juego ancestral.
Prueba de tiro al blanco con arco y flecha. Comunidad Lomalinda, Amazonas.
El Curaca, Robert Curico, líder respetado de Lomalinda, junto con su comunidad, recibió a los visitantes con los brazos abiertos. Sus sonrisas y miradas cómplices expresaban una cálida bienvenida. Un desfile alegre y bullicioso se abrió paso desde el río hasta el campo deportivo, donde la energía de los pequeños se desbordó en los primeros juegos. El sonido del deporte tradicional resonó con fuerza: el atletismo en parejas, el juego de la pelota, el viru viru, el tiro al blanco con arco y flecha y cerbatana, y el juego de la coca. Los gritos de emoción y los aplausos retumbaban en el aire, mientras el sol de la Amazonía se alzaba como testigo de esta jornada llena de vida y cultura.
El segundo día, los juegos se trasladaron a la casa comunitaria, un lugar sagrado donde la tradición se entrelaza con el presente. Aquí, las manos hábiles de los niños indígenas extrajeron la fibra de chambira, torciéndola con destreza en un acto que no solo demostraba su habilidad, sino también su profunda conexión con la tierra. Este acto refleja la sostenibilidad y el cuidado de la Amazonía, un compromiso que estos niños han asumido desde temprana edad. El sonido del trompo tradicional, girando con fuerza y precisión, se mezclaba con las notas de las murgas, ejecutadas con instrumentos fabricados por ellos mismos, como un canto de agradecimiento a sus raíces.
Niños y niñas mirando las pruebas de sus compañeros con atención. Comunidad Lomalinda, Amazonas.
Al caer la tarde, los niños y niñas regresaron a sus comunidades, cargando no solo los premios de los juegos, sino también el orgullo de haber fortalecido su identidad, compartido su cultura y tejido lazos inquebrantables con otros pequeños guardianes de la tradición. Sus corazones latían al compás de la selva, renovados por la experiencia vivida, mientras los gestores de FUCAI, satisfechos, los acompañaban, conscientes de que habían contribuido a preservar un tesoro invaluable: la rica y vibrante cultura de los pueblos indígenas del Amazonas. En este rincón del mundo, donde la naturaleza y el ser humano se funden en una danza eterna, los juegos tradicionales se alzan como un faro de identidad, un recordatorio de que en la simplicidad de un trompo, en la destreza de un lazo o una botara, o en la música de una murga, habita el alma de un pueblo que, orgulloso de su herencia, mira al futuro sin olvidar sus raíces.
Este festival no solo celebró la cultura, sino que también subrayó la filosofía de FUCAI: "Nuestro centro es la periferia". Aquí, en la profundidad de la Amazonía, la periferia se convierte en el centro de un movimiento que busca preservar la identidad indígena y fomentar la sostenibilidad en el cuidado de la Amazonía. El evento se llevó a cabo dentro del contexto del proyecto Cultura, Ecología y Deporte para la Pervivencia de los Niños y Jóvenes Indígenas de la Triple Frontera, ejecutado por FUCAI y apoyado por la organización alemana Kinder Missions Werk, demostrando que la niñez indígena es la clave para un futuro sostenible.